¿Qué es el formato Super 8 y por qué fue tan popular?

Durante décadas, el Super 8 fue el rey de los recuerdos familiares. Esa pequeña bobina de película capturaba cumpleaños, vacaciones, primeras comuniones y momentos cotidianos. Fue el formato preferido por muchas familias desde mediados de los años 60 hasta bien entrados los 80. ¿El motivo? Era económico, relativamente fácil de usar, y sobre todo, accesible.

El Super 8 representó un salto frente a los anteriores formatos de 8mm. Con una mejor definición y una forma más sencilla de cargar la película, miles de personas se animaron a registrar su día a día con estas cámaras. El resultado: una montaña de rollos guardados en cajones, cajas y altillos que hoy duermen en la oscuridad, con el riesgo de perderse para siempre.

¿Por qué es importante la digitalización de Super 8?

La digitalización de Super 8 no es solo una cuestión técnica, sino emocional. Es la posibilidad de traer al presente aquellas imágenes que forman parte de la historia de nuestras familias. ¿Te imaginás volver a ver en pantalla a tus abuelos en movimiento, o el cumpleaños número uno de tu padre? Eso es lo que se logra al digitalizar estos recuerdos.

¿Qué pasa si no digitalizo mis cintas?

Lamentablemente, el paso del tiempo es implacable. Cada año que pasa, las películas se dañan un poco más. Algunas llegan a un punto en que no se pueden rescatar. Por eso, cuanto antes te ocupes, mejor.